El proceso de Digitalización está cambiando nuestra vida cotidiana, nuestros hábitos de consumo y la forma en que fabricamos, trabajamos y nos comunicamos. Esta Transformación Digital va más allá del uso e implementación de nuevas tecnologías, repercutiendo directamente en los modelos de negocio de las empresas, convirtiéndose en un activo fundamental y en una palanca clave para potenciar su competitividad.
Uno de los objetivos de la Oficina de Transformación Digital (OTD) de ANFACO-CECOPESCA es facilitar a las empresas el conocimiento sobre los principales habilitadores digitales y su aplicabilidad en el sector. Por esta razón, OTD ANFACO-CECOPESCA ha organizado el pasado jueves 17 de diciembre la 5ª Jornada de Transformación Digital en la Industria Mar-Alimentaria.
Una serie de ponencias orientadas a acercar al sector tecnologías de vanguardia orientadas a generar valor en nuestras organizaciones, unidas a otras enfocadas en la reducción de costes operativos, como son los Sistemas de control y gestión del consumo energético, el Mantenimiento Predictivo o la Trazabilidad Alimentaria digital.
El grupo ISEGA estuvo presente en estas jornadas gracias a la participación de D. Manuel Pais Saforcada, Responsable Técnico de Mantenimiento Predictivo de ISEGA, que habló sobre “El Mantenimiento Predictivo como fuente de eficiencia”.
Detalles de la ponencia
Las plantas de procesado son de las inversiones más elevadas que debe afrontar la empresa industrial Mar-Alimentaria, por lo que conseguir el buen estado de conservación de su sistema productivo y alargar su vida útil es de vital importancia para la continuidad empresarial.
Además, la propia eficiencia en costes de la planta está condicionada por su grado de conservación: incidencias energéticas debidas a la mala conservación de conducciones o equipamiento térmico o de frío, mermas indebidas provocadas por desajustes en la maquinaria, paradas no planificadas por fallos o atasques de la línea, etc.
El mantenimiento predictivo nos ayuda a realizar esta conservación de las infraestructuras de forma óptima, sin incurrir en el grueso de los costes recurrentes de mantenimientos preventivos o correctivos tradicionales y evitando esas incidencias en la producción.