El gran papel de la robótica colaborativa en la industria es indiscutible; versatilidad, adaptabilidad, facilidad de uso y precisión la hacen especialmente útil en la práctica totalidad de los sectores industriales.
En la actualidad 4.0 una nueva figura emerge en el campo de la robótica colaborativa: los cobots.
Un cobot puede resultar muy útil en otros entornos menos industriales y eso se refleja en su expansión y generalización. La fácil configuración, las funciones inteligentes avanzadas, la autonomía, la colaboratividad y la flexibilidad son algunas de las ventajas que ofrecen estos manipuladores móviles, beneficiando hoy en día a los grandes sectores industriales de todo el mundo.
Las posibilidades son infinitas y sus campos de aplicación, ilimitados, la tecnología está creada; los cobots ya han demostrado su valía. Es el turno ahora para que empresas tecnológicas, ingenierías e investigadores afinen su ingenio y creatividad, y exploten todo su potencial en beneficio de nuestra sociedad.
En este sentido, ISEGA cuenta con amplia experiencia en el sector de la automatización industrial utilizando la robótica colaborativa para adaptarnos mejor a los requisitos del cliente.
El proyecto «Línea de traseros P24» sería un buen ejemplo de ello.
